La asociación

Desde tiempos pretéritos, la localidad aragonesa de Graus se ha caracterizado por la elaboración de embutidos de una manera artesanal con una calidad y un sabor muy reconocidos en el sector.

Utilizando siempre los mejores ingredientes naturales, la Longaniza de Graus es el máximo exponente de los embutidos elaborados en esta zona ubicada en la provincia de Huesca bajo los picos más altos del Pirineo.

A través de estos últimos años la Longaniza de Graus ha conseguido un posicionamiento muy importante en el exigente mercado español de los productos cárnicos.

La Asociación de Fabricantes de Longaniza de Graus, con la colaboración del Gobierno de Aragón, desea seguir ampliando esa imagen de marca, aumentando la cuota de mercado y promoviendo una serie de actividades para que la Longaniza de Graus siga estando entre los alimentos más destacados de Aragón.

Para la elaboración de este suculento embutido se emplea carne magra de cerdo (un mínimo del 70%) y panceta, papada o tocino ( que nunca debe sobrepasar el 30%). Como condimentos y especias pueden emplearse sal común, pimienta, orégano, nuez moscada, anís o vinos olorosos, clavo y otras especias naturales (salvo pimentón), combinados con las características tradicionales de la comarca.

La Asociación de Fabricantes de Longaniza de Graus, con la colaboración del Gobierno de Aragón, desea seguir ampliando esa imagen de marca, aumentando la cuota de mercado y promoviendo una serie de actividades para que la Longaniza de Graus siga estando entre los alimentos más destacados de Aragón.

En cuanto a la elaboración de este suculento embutido se emplea carne magra de cerdo (un mínimo del 70%) y panceta, papada o tocino ( que nunca debe sobrepasar el 30%). Como condimentos y especias pueden emplearse sal común, pimienta, orégano, nuez moscada, anís o vinos olorosos, clavo y otras especias naturales (salvo pimentón), combinados con las características tradicionales de la comarca.

La longaniza debe presentar un aspecto homogéneo y de ligazón a la masa, embutiéndose en tripa natural. La presentación es en forma de herradura, de 20 a 70 cm. de longitud. No es casual que nuestra longaniza esté acreditada con la marca C’Alial de calidad alimentaria de Aragón. Un sello que solo pueden exhibir quienes mantienen un estricto compromiso con la pureza de los ingredientes y la máxima exigencia en su manipulado. Así elaboramos la exquisita Longaniza de Graus, siempre de una manera natural y completamente artesanal.

Aventín fue fundada hace medio siglo por Basilio Aventín en Graus. El comienzo de esta andadura era la de atender su propia carnicería familiar, pero en poco tiempo la empresa dejó de ser precisamente familiar para en el año 1981 transformarse en la actual empresa que es hoy: Embutidos AVENTÍN S.A.

Aventín es sinónimo de sabor, calidad y servicio. Disfruta de una ubicación excepcional junto al Pirineo aragonés que le brinda un entorno natural idóneo para curar sus productos y para disponer de una materia prima de gran calidad.

Aventín, ya considerada una PYME, cuenta con un equipo de la más alta experiencia y profesionalidad del sector.

Las exigencias de calidad, en la que destacan unos estrictos controles sanitarios, hacen de Aventín una empresa que garantiza la trazabilidad de sus productos y efectúa un exhaustivo control desde  el origen hasta el cliente final. Para ello cuenta con un departamento de calidad propio, además de empresas  externas como Laboratorios Cobrial y el Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón. Aventín posee la certificación Aragonesa Calidad Alimentaria en varios de sus productos.

Empresa de reconocida experiencia en la elaboración y distribución de carnes, embutidos y jamones, Aventín ofrece un servicio individualizado a la medida de cada cliente. Con dos puntos de venta en Graus, uno de ellos renovado y ampliado en 2008, la empresa satisface las necesidades de sus clientes, acerca toda su gama al público y ofrece una amplia variedad de productos agroalimentarios de la zona.

Aventín dispone de una red de departamentos comerciales especializados en Graus y Zaragoza que asegura aún más el buen servicio al consumidor. Además está  presente en las tiendas tradicionales,  plataformas logísticas, distribuidores, hipermercados así como en grandes colectividades, hostelería, colegios, hospitales…

Asimismo, ofrece a sus clientes un servicio de compra virtual mediante la Web de la empresa y las redes sociales como Facebook, Twitter… 

Aventín obtuvo su primer reconocimiento en 1987 con el V “Trofeo Internacional Tradición y Prestigio” en Bruselas, la empresa también fue reconocida en Graus en 1992 con el premio “Calibo a la mejor iniciativa empresarial”, recayendo sobre la sucesora e hija de Basilio Aventín, María Dolores Aventín.

En su permanente aspiración por satisfacer las cambiantes necesidades de la sociedad actual, Aventín continúa con entusiasmo la búsqueda de nuevos productos que se adapten mejor a los nuevos gustos y demandas. 

La empresa Embutidos Artesanos Melsa S.L. es una empresa familiar situada en el centro de Graus.

Los primeros documentos municipales que certifican la existencia de Melsa como elaboradores y carnicería datan de 1860 y en estos se nombra que la familia se venía dedicando a este menester desde tiempos inmemoriales. Un hecho digno de mención son los 150 años que cumplió en el 2010 siendo un referente en nuestro sector.

La familia regentó durante años una carnicería que estuvo ubicada en diferentes puntos de Graus hasta que en el año 1933 Salvador Egea Lacambra inauguró la nueva tienda-carnicería con un obrador en la parte trasera. Actualmente la tienda continúa con la misma actividad y en el centro del establecimiento figura una inscripción con dicha fecha conmemorativa.

El matrimonio de Salvador y Conchita fusionó dos linajes dedicados al negocio de la carne, que aportaron lo mejor de cada familia para crear el alodio que es en la actualidad “Casa Melsa”.

Manjares exclusivos de receta centenaria como la gallina trufada, así como el foie gras negro o de la abuela, son alguno de los aportes que por parte de Conchita se hicieron. Melsa por su lado contribuyó a esta unión sumando entre otros la afamada longaniza llamada antaño doncha o “pura”.

La filosofía de esta empresa es un legado que se viene traspasando de generación en generación, sin proponérselo, simplemente haciendo partícipes a los sucesores de un objetivo ilusionante: el de apostar por productos cada vez mejores. Empezando por  unas materias primas de excelente calidad, como el latón de la Fueva, el buey de los Valles del Esla, el ternasco de Aragón (TA), la ternera parda-alpina del Valle de Benasque o el cerdo D.O. Teruel. A esto se suma un proceso de elaboración meticuloso y presentado con las últimas tecnologías en envases y packaging, que acaba garantizando un producto digno de sus clientes.

De la tradición a la innovación como es el caso de los “trufitos” elegido producto de innovación diferenciado en el “Salón del Gourmet de Madrid 2011”, Melsa ofrece a sus clientes gratificantes experiencias en cada una de sus referencias. Los reconocimientos que avalan a Melsa son primero y principalmente el nivel de satisfacción de los clientes, que es transmitido en cada visita a nuestro establecimiento. Contamos en nuestro haber con reconocimientos institucionales de relevancia que dibujan la trayectoria de esta familia, como son el “Trofeo Internacional de Alimentación y Bebidas de Dusseldorf” en 1995, el “Premio a la Excelencia Empresarial” en 2008, concedido por la cámara de comercio de Huesca, o el “Premio Alimentos de Aragón a la Mejor Industria Agroalimentaria en 2011”

Casa Maella es una de las empresas cárnicas más antiguas de la comarca. En un entorno rural plenamente integrado en la población de Graus y en una de las plazas porticadas más bellas de Aragón, se ha ido consumando la tradición chacinera de Casa Maella, una gran familia de artesanos del embutido.

Con el transcurrir de los años y tras varias generaciones, Maella ha ido ligando los conocimientos artesanos tradicionales de sus primeros pasos con las nuevas y modernas tecnologías de hoy en día, consiguiendo productos de máxima calidad con recetas que nos recuerdan al pasado. Maella fabrica artesanalmente distintos manjares derivados todos ellos del cerdo y como gran referencia encontramos nuestro producto estrella, la tan afamada Longaniza de Graus, que siguiendo la tradición y el buen hacer  de nuestros antepasados da constancia de ello.

Todos están invitados a conocer la amplia gama de productos artesanos que elaboran en sus instalaciones. Sus embutidos se preparan con carnes de cerdo seleccionadas, condimentadas con sal y especias como pimienta, clavo, orégano, canela, cilantro, romero, anís en grano, ajos y pimentón, entre otras; y piñones, almendras y avellanas. Casa Maella elabora longaniza fresca, semicurada y curada. También un tipo de secallona de calidad extra, todo ello con excelente tripa natural.

Algunos de los procesos utilizados son totalmente manuales y artesanales que dan como resultado unas excelentes chiretas o una fantástica gallina trufada que invita a su degustación. Todo esto, unido al excelente clima del Pirineo y a nuestra ubicación en la Ribagorza, confieren a sus embutidos un sabor y una calidad diferenciados. 

Cumpliendo con la normativa de la Unión Europea, disponen de unos controles de calidad mucho más rigurosos, además de la obtención del sello de ‘Calidad Alimentaria’ concedido por la Gobierno de Aragón que controla la indiscutible calidad del proceso y de los ingredientes utilizados  y que otorga una garantía añadida a sus embutidos.

En su proceso productivo tratan de diferenciar las necesidades de cada cliente aceptándose a la complejidad y exigencias de los mercados actuales, donde la  tradición y la innovación  forman parte de su filosofía.

Con el paso de los años y hasta nuestros días, han mantenido la tradición y el buen hacer  de sus orígenes que apoyado en las nuevas tecnologías, hacen que los embutidos de Casa Maella consigan el mismo sabor de antaño.